Me consume tu dolor.

Intentar comenzar la entrada sin un "no" me ha costado horrores...tantas cosas desecharía de mí que no sé por cual empezar. Manejo las palabras como puedo, mientras tiemblo de pies a cabeza, leyendo lo que me escribes: "me siento destruido, todo el día con la lágrima a flor de piel y cansado, de mal humor, sensible, muy vulnerable y dolido." Me cuesta no asomar la cabeza por la ventana y gritarte que no quiero que estés así, que por ello me voy a coger un avión muy lejos del mundo y dejaré de molestarte...


No soporto pensar que cada día las nubes sean más negras, me come por dentro saber que mi final se pierde y no luchamos, me consume tu dolor.
No quiero esto para ninguno de los dos. Espero a que los fantasmas detrás de mí se cansen de destruirnos. No quiero esto para ti, te mereces lo mejor y yo no soy lo mejor, me da rabia saber que no estamos destinados en uno para el otro, queremos pero no podemos.
Últimamente todo me sale mal...y no te ayudo pero tampoco me ayuda que no pongas de tu parte...creo que es ahora cuando ambos tenemos que ser fuertes y atarnos...si no haces nada...Te pierdo, me pierdes, me pierdo, te pierdes...

Cada sentimiento que se interpone en mi amor, cada martillo en la cabeza y en el corazón, desgastan lo que hemos construido, lo único que puedo pensar es que hemos vivido magia...y que si no crees en ella, se va. Solo pienso en la magia, en tu sonrisa, tu pelo, tu voz, tu olor, para mi son mágicos...cierro los ojos y lloro por miedo a que desaparezca la magia...no paro de pensar en ti y no quiero expresarte cuanto puedo luchar por ti en un mensaje, quiero arrancarme del pecho el corazón y dártelo, porque sé que tú sabrás cuidarlo mejor que yo o que ninguno.




Déjame vivir por ti...

La Cantata del Diablo

"Hoy mis lágrimas se quieren suicidar
acurrucadas, morir en tu piel
han nacido secas, tienen sed
mi llanto hoy se quiere morir.

Si tus lágrimas se quieren suicidar,
guardalas pues vas a llorar:
llorarás océanos de paz
duérmete ya no hay dolor."




Por más que me paro a pensar, no encuentro otra vida en la que si te mirara como un desconocido sentado en frente de mí en el metro, o en un restaurante, o simplemente andando en la calle; no me encantases con la primera mirada...pero sé que encontrando otra vida o no, lloraría lo mismo que he llorado.